Cómo instalar whatsapp

Ayer, a eso de las cuatro o las cuatro y pico (después de comer), me dio por hacer una llamada. Me contesta enseguida, diciéndome que no podía hablar conmigo en ese momento ¿en qué lugar de la conversación se quedó el hola?. Menos mal que antes de colgarme se acordó de preguntarme que tal estaba. Me quedé pasmada, que raro, estará liado...¿a estas horas?.

Quince o veinte minutos más tarde me llama, y me dice que no me podía atender que estaba en la cama con la chica (¡¡¡.....!!!), y yo parecía un anuncio de Buberry, a cuadros.... Y para rematar va y me dice que estaba ¡¡¡PROBANDO EL COLCHÓN!!!
Anda, anda, tú no te cortes, chico, luego tira a probar el sofá, y el plato ducha, y el suelo que ahora está fresquito y con calor se agradece, y también la encimera de la cocina, vamos, que puedes hacer lo que te de la gana que a mi me da Instalar whatsapp (¡¡¡......!!!).

http://whatsappinstalar.com/

Y es que había ido a comprarse una cama, y claro, una ya se figuraba algo, pero me gusta sacarle punta a todo. Eso sí, debiste decirles que en el albarán incluyeran a la chica (la dependienta), como un bulto más (para el envío digo). Y que te la embalen bien no se raye por el camino, bien liadita en plástico, sobretodo la cara, a ver si hay suerte y se ahoga. Y cuando te monten en la cama que de paso te la dejen montá a ella encima. Si es que...

Bueno, todo esto es pitorreo, que no, que nada malo le deseo a esa eficaz , atenta y guapa joven tan profesional que te atendió, ni me da rabia pero... ¡¡es que yo quería ir contigo a probar colchones!! De verdad, con la ilusión que me hacía a mi eso de dar un poquito la nota en la tienda y provocarte colchón tras colchón... Porque claro, un buen colchón es importante, y más cuando este se va a someter a un duro desgaste, y lo pruebas con otra ¡ainsss negra me tienes!

Y esta mañana me levanto y voy a sacarme sangre (sí, otra vez) y las niñas del laboratorio se esconden cada vez que me ven y me temen porque ayer las pasaron canutas para encontrarme la vena, ¡hasta las venas las tengo chulas! y tras pinchar varias veces optan por el plan C, destrozarme el dorso de la mano, y me da rabia que me saquen sangre de ahí porque siempre acabo con un enorme moratón feo a más no poder, que primero tiene un color azulado, y según pasa los días comienza a tomar un tono verde amarillento espantoso. Quiero aclarar que no estoy enferma, que estoy buenísima.